domingo, 26 de septiembre de 2010

En bachillerato. Los colegios deberán ofrecer una alternativa a Religión


Las sentencias anulan el punto que disponía que los alumnos podían quedarse en el centro durante el horario asignado a esta enseñanza.




ALMA | EFE Los centros públicos de Baleares deberán ofrecer una asignatura alternativa a la de religión en los cursos de bachillerato, según estipulan dos sentencias del Tribunal Superior de Justicia de las islas que resuelven sendos recursos del Obispado de Ibiza y de una asociación católica contra un decreto de 2008.

Las sentencias, fechadas este mes, responden a dos de los siete recursos presentados por los obispados de las islas y por varias asociaciones católicas, según ha explicado hoy en rueda de prensa el portavoz de Escuela Católica, Marc González, quien ha hecho un llamamiento a la Conselleria de Educación a que acate la sentencia y no la recurra al Tribunal Supremo.

En los recursos del Obispado de Ibiza y de la Confederación de Federaciones y Asociaciones de Familias de la Escuela Católica de Baleares, que son iguales a los cinco restantes, se pedía la anulación de una disposición del decreto de 82/2008 de la Comunidad, que establecía la estructura y el currículum de bachillerato en Baleares.

Las sentencias del TSJIB anulan solo uno de los puntos de la disposición, en concreto el que dispone que los alumnos que no opten a la asignatura de religión podrán quedarse en el centro durante el horario asignado a esta enseñanza realizando actividades de estudio.

Según los recurrentes, esta disposición vulnera el acuerdo entre el Estado y la Santa Sede de 1975, en el que se indica que el plan de estudios de bachillerato debe incluir la enseñanza de la religión católica en condiciones equiparables al resto de disciplinas fundamentales.

En su opinión, el decreto de 2008 no respeta esta equiparación y trata la enseñanza de la religión "discriminatoriamente", ya que no cuenta con una alternativa, "lo que no ocurre ni con las asignaturas optativas". De esta manera, alegan, el alumno que no cursa religión tiene más tiempo libre.

Además, según destacaban los recursos y hoy ha recordado González, los institutos programan la religión a primera hora de la mañana y a última de la tarde, cuando el resto de alumnos no están en el centro, de manera que, en el 90 por ciento de los casos, no pueden usar el transporte escolar.

Este decreto ha provocado, según González, que el número de alumnos de religión haya pasado de los 277 registrados en el curso 2007/08 a los 86 del 2008/09, un notable descenso fruto de la que ha considerado una "discriminación clara y palmaria que ha causado graves perjuicios a los derechos de los alumnos y del profesorado".

La Comunidad Autónoma se defendió de los recursos alegando que el bachillerato es una etapa educativa voluntaria y que, por tanto, no se pueden obligar al alumno que decide no cursar religión "a permanecer en el centro por la sola razón de que sus compañeros han ejercitado una opción personal".

En sus dos sentencias, la Sala de lo Contencioso Administrativo del TSJIB da la razón al Obispado y la Confederación en cuanto a que el tratamiento que actualmente se le da a la religión no es equiparable al resto de asignaturas, tal y como estipulan los acuerdos con la Santa Sede.

Además, explica que aunque el bachillerato es voluntario, está sujeto a estos acuerdos y que la asignatura de religión, "para disponer de las ineludibles -antes y por ahora- condiciones equiparables a las disciplinas fundamentales, al menos ha de configurarse como optativa, es decir, con alternativa académica".

González ha instado por ello a la Conselleria a que acate la sentencia y permita que se incluya una asignatura alternativa, aunque ha reconocido que este curso será "complicado" hacerlo, y también le ha pedido que los horarios se hagan "con sentido común y y con equidad".

Según el portavoz de Escuela Católica, ya se advirtió de esta "discriminación" a la Conselleria, pero "no hubo manera" de que cambiara el currículum, una actitud que hizo sospechar a la asociación de que había "un fondo ideológico" y una "estrategia de partido".